Ha sido una jornada especial por el gran número de personas que se han congregado, más de 800, en el antiguo seminario de Derio. Pero también, porque las personas que conforman las 7 vicarías de la Diócesis de Bilbao han visibilizado la riqueza y variedad de las comunidades. Se ha vivido un día «con el corazón agradecido por todas las personas que han formado parte» de la historia diocesana, así lo señalaba el obispo en su intervención. Un día lleno de sorpresas en el que, se ha estrenado la canción que sonará durante un curso extraordinario para la Iglesia en Bizkaia.
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